La CIA y su primito- hermano, el FBI, desde su esencia son los custodios " a sangre fría" del orden "occidental y cristiano". Esta vez, la vigilancia imperial se hace más dificultosa:
El Director del FBI Robert Mueller reconoció que el FBI utilizó cartas de seguridad nacional en forma inadecuada en 2006 para acceder a registros telefónicos, informes de crédito y tráfico de Internet de estadounidenses.
Mueller confirmó la violación de la privacidad durante una declaración ante el Comité Judicial del Senado.
Las cartas de seguridad nacional le permiten al FBI obtener en forma secreta información personal acerca de ciudadanos estadounidenses sin órdenes judiciales. La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles acusó al FBI de ignorar tanto la ley como las directrices internacionales sobre cartas de seguridad nacional.
Ese hombre de cara de goma que hizo carrera en el FBI...
La visible actividad en la sede de Washington coincide también con la mayor reorganización del FBI desde que en 1908 fuera concebido como un pequeño grupo de investigación con 34 agentes al servicio del Departamento de Justicia.
El 11-S, junto a todos los fallos de seguridad que hicieron posible esa traumática ofensiva terrorista, se ha convertido en un antes y después para esta institución policial que ahora no tiene mayor prioridad que prevenir nuevos atentados contra Estados Unidos.
Robert Mueller, con tan sólo dos meses de experiencia como director del FBI cuando Al Qaida logró transformar aviones de pasajeros norteamericanos en misiles de crucero, es el encargado de hacer realidad toda esta radical transformación.
Su currículo abarca desde el combate en Vietnam hasta los máximos niveles en la carrera fiscal. Tenacidad de «marine» y respeto por el imperio de la ley no son precisamente malas credenciales para los erizados tiempos que corren.Robert Mueller, con tan sólo dos meses de experiencia como director del FBI cuando Al Qaida logró transformar aviones de pasajeros norteamericanos en misiles de crucero, es el encargado de hacer realidad toda esta radical transformación.
Al recibir a un pequeño grupo de periodistas en la planta séptima del «Hoover Building», lo primero que Mueller recalca es que «somos una organización que tiene que luchar contra el terrorismo y tiene que poner a criminales en la cárcel pero también somos ante todo una organización con la responsabilidad de defender los derechos fundamentales de todo ciudadano de Estados Unidos».
Y de hecho, este director del FBI ha sido uno de los mayores críticos contra los precipitados planes para crear un servicio de espionaje doméstico al estilo del MI-5 británico.
Para resumir el cambio de estrategia asumido por el FBI, Mueller recalca la proyección global que han cobrado sus fuerzas: «Nos vamos a dedicar menos a investigar delitos locales y más a investigar delitos internacionales».
Y él mismo se encarga de advertir a sus nuevos agentes de que se vayan mentalizando porque durante sus carreras serán destinados al menos una vez fuera de Estados Unidos para trabajar en algunas de las cuarenta delegaciones del FBI por todo el mundo, incluido el codiciado puesto de Madrid.
Esa manía de ser el "botón del universo"...
El funcionario declaró ante el comité judicial del Senado que la violación a la privacidad de los individuos por parte de agentes del FBI y abogados ocurrió un año antes de que la agencia realizara vastas reformas a fin de evitar que eso volviera a ocurrir. Los detalles de los abusos cometidos por el FBI serán difundidos en los próximos días en un informe del inspector general del Departamento de Justicia.
El funcionario añadió, "Estamos comprometidos para asegurar que no sólo actuaremos con corrección, sino que mantendremos la vital confianza del pueblo de Estados Unidos".
En respuesta a Mueller, el presidente del comité judicial del Senado, el demócrata por Vermont Patrick Leahy, pidió al jefe de la agencia policial poner más atención a fin de corregir "el uso inapropiado e ilegal de cartas de seguridad nacional".
Leahy dijo que "debería existir una mejor cadena de mando para esto.
No se puede permitir que un agente del FBI decida que quiere obtener los registros de un estadounidense simplemente porque así lo desea".
Las cartas nacionales de seguridad son órdenes de comparecencia dispuestas en la Ley Patriótica para realizar investigaciones sobre terrorismo o espionaje.
Posdata: Con seguridad , la vigilancia "pos 11 S" será una cuestión de estado. Lo significativo que todos nosotros seamos los principales sospechosos, y no los muchachos de la CIA y el FBI, que generaron aquél Septiembre negro...nó ?
* Fuentes: DEMOCRACY NOW! / AN / Wikipedia /Univisión /ABC.es /
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